¡Qué ricas vacaciones!

Todo cuanto empieza
tarde o pronto
aunque no quieras
tiene que acabar...

Los versos anteriores que hace unos años interpretó Chao vinieron a mi mente al descubrirme exprimiendo los últimos días de las vacaciones, que ya están a punto de terminar, pero cuyo resultado es un delicioso sabor de boca que me queda después de 2 ricas semanas de actividades recreativas, cuyo toque académico de mi curso en línea ininterrumpido viene a acompletar las variadas actividades que pude realizar. Pero ese curso... es otra historia.

El inicio, que se dió con un par de visitas de reencuentro con muy buenos amigos, fue la mejor forma de recibir este período vacacional. La primera, con la agradable y fructífera plática con Luis y Valeria, y la segunda, con la tan esperada y emotiva visita de Lizzie, Ramón y sus nenas hermosas. ¡Gracias amigos!

En los viajes de estos días, la companía auditiva de Jorge Bucay, quien afirma que "los cuentos se hicieron para ser contados", fue la acertada adquisición para darle un toque diferente al sonido de fondo, añadiendo ese toque de reflexión que tanto disfruto y que generalmente tiene lugar en mis ocasionales pero exquisitos y valiosos ratos de soledad.

Por fin pudimos hacer esa visita en familia casi-completa a uno de los parques que más me ha gustado, tanto por sus atractivos y bellezas naturales como por el espectáculo nocturno que representa maravillosamente la unión de la cultura española y la cultura maya, acompañado de la representación folcklórica de algunos estados de nuestro país. Por cierto, quien crea que el juego de pelota ya no se practica, sólo tiene que visitar el pueblo Maya de Ek-Balám cuyos niños entrenan para posteriormente aspirar a una oportunidad de empleo en este tipo de espectáculos como el que describo y que se presenta en Xcaret.

Durante esos días en los que nuestra casita resultó muy pequeña para albergar a toda la familia, la companía y la convivencia fueron de las cosas más placenteras. Doce personas fue un bonito número, ahora nuevamente se reducen a dos... mas un trocito de 4 patas, que también cuenta. ¡Cuánto nos gustaría que estas visitas se dieran con más frecuencia! esperemos que muy pronto se vuelva a repetir.

Y por si fuera poco, la risoterapia que nos regalamos en la reunión de ayer, y que por cierto se ha vuelto una deliciosa costumbre de nuestras últimas reuniones personales, telefónicas y virtuales, fue el toque perfecto para reafirmar que no es la tecnología, ni son las fotos, ni las cenas, ni las idas de compra, ni los reportes, ni la tesis, ni photoshop... no importa lo que hagamos, quizás es simplemente que, Amiga, eres la hermana que Diosito me envió cuando un día le pedí una. ¡Gracias loquis!

A propósito de hermanas, ese par de traviesas "repetidas" que estuvo de visita con nosotros estas vacaciones, me dejó con ganas de más... y es que sin ese ritmo, esas energías y esa alegría que llevan en las venas, no hubiera sido lo mismo. Por un momento hasta mi mounstrita de 4 patas sacó la lengua y buscó su mejor esquina para descansar. Esperemos que las experiencias, los juegos, los zapatos, la tecnología a su disposición y los trabajos que hicimos, sean lo suficientemente memorables como para que muy pronto las tengamos de nuevo por aquí :)

¡Cómo cambia la perspectiva con el paso de los años! Todavía recuerdo cuando en mi adolescencia contaba con ansiedad los días que faltaban para regresar a la escuela... a diferencia de ahora que los cuento con una franca resistencia. Y no quiero decir que no desee regresar a las actividades laborales que disfruto mucho, quizás es solamente que, en tiempos de clase, es más difícil disfrutar tanto a la mi familia y a los amigos, como se puede hacer cuando estamos de vacaciones. Afortunadamente, en el trabajo y en esta ciudad, también están presentes muy buenos amigos y quizás esa es la razón por la que, pensándolo bien, hoy también extraño un poco regresar a la escuela.

En fin, si al leerme hoy se les antoja irse por otras vacaciones, sólo recuerden que "no hay mejor descanso que aquél que se toma una vez terminado el trabajo".